RECORRIDO POR EL HOTEL AMÉRICA

AHÍ LES PONGO LA COMUNICACIÓN QUE ME ENVIÓ LUIFRAN. ESTA CONTRIBUCIÓN ME HA LLENADO DE MUCHA SATISFACCIÓN Y GRATITUD. ASI QUE... AMIGO LUIFRAN... SI LOS OTROS DESCENDIENTES DE PACHO Y MECA NO HACEN ALGO... TU SERÁS EL PREFERIDO... HASTA AHORA... TENDRÁ QUE VER CON LA HERENCIA Y TODO.. OK?... UN ABRAZO MENDOCIANO PARA TI..
"Excelente idea tio, hay estas pintao, me alegro y me uno, aca te mando una contribución para que la publiques, como yo era el nieto que mas pasaba tiempo en el hotel por que vivia en la Paz y entonces me dejaban con los abuelos cuando el Pale y Cecilia se iban de compras y diligencias a Valledupar me la pasaba recorriendo ese laberinto aca te mando una de varias memorias. Abrazos y saludos


RECORRIDO POR EL HOTEL AMERICA

2:00 pm, hora de irse a hacer vueltas a Valledupar, mis padres me dejaban en el Hotel America, mi patio de juegos, era toda una aventura, lugar con infinitas habitaciones, laberinto que te llevaban a otros mundos jamas vistos.

Me recibia mi abuela Meca, siempre brindandome algo de comer (es que siempre fui muy flaquito) a esa hora hora las mesas del hotel estaban atiborradas de gente tomado cervezas para sobrellevar el calor, en las mesas que parecian de madera pero era un papel que daba esa impresión, en unos vasitos de vidrios que ya no vienen.

La abuela en la cocina pendiente de la comida, mi abuelo Pacho adentro , el salia mas tarde a coger fresco, y yo libre en el patio de juegos mas grande del universo, una terraza donde conoci personajes de paso y donde aprendi mi primer truco de magia con cartas que me enseño un cachaco que iba de paso, y Oscar Olivella trataba sin exito de descifrarlo matematicamente, el mismo chachaco vendia la maravilla del tecnicolor, eran unas pantallas que se le adaptaban a tu TV a Blanco y Negro, con una serie de lineas naranjas, verdes y azules que se repetian y te permitian ver a a Frankinl Linero en 7 colores.

Un laberinto lleno de habitaciones donde siempre encontraba juguetes nuevos (ahora entiendo que era mercancia de los inquilios, mercachifles de paso), un patio coronado por un arbol de guayab blancas, inmenso que no dejaba ver el sol, el traspatio, con un galpon de gallinas de todos los colores, siempre con la tierra mojada donde no me dejaban ensuciareme pero siempre me ensuciaba y el teatro, usado en esa época como bodega de arena, tenia unas dunas altisimas donde rodaba y más de un juguete perdido debe estar enterrado todavía.

Luego salia mi abuelo cuando el calor era más soportable, la autoridad, todo el mundo temblaba en su presencia (era mi impresión de niño), veterano de guerra, tenia un cartucho de bala casi de mi tamaño y un perro negro absoluto coronado con una corbata blanca llamado Comandante I; perro con fama de guapo pero que respondia a comandos verbales de mi abuelo como si fuera un soldado, sienta, hechate y se hechaba a sus pies.

Entonces huia a la farmacia de Pacho, tocayo de mi abuelo, quedaba al lado, el me permitia leer los paquitos de superman y memin que mi padre traia de Valledupar, pero que yo me adelantaba y los leia primero en esa farmacia.

Al final de la tarde me sentaba al lado de mi abuelo, el en una mecedora y contandome cosas que la memoria hoy me niega, no esperando la hora que me vinieran a recoger, sino, esperando la hora que me dejaran otra vez en el magico mundo del Hotel America, el mejor parque de divesiones del mundo.

LUIFRAN.

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Luis Francisco Gutierrez
Representante Legal